Los Juegos Nacionales arrancaron la mañana de este domingo con diferentes competencias, entre ellas la esgrima que tiene la participación del Atlántico, cuyos deportistas debieron empezar su participación con espadas y máscaras prestadas, pues las de ellos no llegaron a tiempo.

Una penosa situación se vivió en el complejo recreacional de Competol, en Ibagüe, donde se desarrollan las competencias de esgrima.

Al momento de hacer la prevención a los deportistas para que se prepararan para el inicio de la competencia, los espadachines albirojos se encontraron que de ese apelativo solo tenían su habilidad, pues la espadas no habían llegado. Tampoco las máscaras que protegen la integridad de sus rostros al momento del combate. Es decir, su presencia, en especial en la modalidad florete, está en total riesgo.

Para poder resolver el impasse, el delegado debió ‘pelarse la cara’ ante las delegaciones de otros departamentos, para que les proporcionaran los elementos para competir.  

Según expresó Ivonne Zúñiga, presidenta de la Liga de Esgrima del Atlántico, la situación se dio por la una suma de factores, los cuales son difíciles de asimilar desde la orilla de la observación.

Según la directiva, “hace 15 o 20 días estábamos tratando de comprar los implementos, pero no los habían en los distribuidores de acá en Colombia. Los conseguimos en Estados Unidos, pero el muchacho que los iba a traer se le atrasó el vuelo”, comentó.

Así mismo, dijo que “Indeportes nos entregó los recursos para estos implementos hace 15 días. Eso fue mientras nos aprobaban el recurso y todo se complicó por la ley de garantías”, sostuvo.

Sin embargo, se sabe que los recursos para viajes y hospedajes hace tiempo estaban asegurados. Los recursos para los implementos, al parecer, fueron solicitados con tiempo posterior. Por lo cual todo se complicó.

Es importante aclarar que los deportistas ya tenían sus espadas y que algunas se desgataron producto del entrenamiento previo a la participación. Pero desde ese momento, poco se hizo para volverlos a dotar a la altura. Además, las máscaras y los chalequillos protectores son necesidades de hace tiempo.